lunes, 26 de septiembre de 2016

“EL PODER”, O EL ANSIA DE PODER HACE PERDER LA CORDURA?

BREVES REFLEXIONES SOBRE “EL PODER”

Es necesario, en una sociedad organizada, que algunas personas, o un grupo de ellas, ostenten la representación de las demás para tomar las decisiones según los valores de la mayoría, y gestionar las necesidades y el progreso de dicha sociedad. Es el poder “delegado” que les confieren sus representados.
Así, a simple vista, podríamos decir que es una opción altruista, o al menos basada en valores que trascienden la vida individual, y que pretenden dedicar sus esfuerzos a un “destino” más elevado. Esta dedicación no tiene por qué ser altruista, y lo normal, es que esté remunerada.
La forma de llegar al poder, es, imponiendolo, como es el caso de los dictadores, que se sienten ungidos por el destino para liderar sus subjetivas metas. La otra forma, es la elección por parte de los ciudadanos, con sistemas más o menos representativos.
Pero "el poder" tiene su lado oscuro. Voy a citar a algunos autores actuales en sus juicios sobre el poder.
. Fernando Arrabal en “La dudosa luz del día” Espasa Calpe, con agudo análisis escribe “¡Qué droga el poder! A medida que pasan los años, los que gobiernan (aunque solo sea una federación), se vuelven escépticos y dedican toda su energía a permanecer en el puesto. ¡Cómo eliminan a los apuestos! ¡Con qué saña persiguen a los candidatos a la sucesión! Pero Séneca dijo a Nerón: Cualquiera que sea el número de personas que mates, tu sucesor no estará entre ellos”.
La mayoría de los candidatos a los distintos poderes no son las personas más capaces y honradas. El perfil de la mayoría de ellos no es precisamente altruista y de fiar. Como dice Adolf Tobeña, “Cerebro y Poder” Ed. La esfera de los libros.
“la biología humana impone que, en el trayecto para alcanzar cotas altas de poder político, resulten primados quienes reúnen condiciones para el bandidaje parasitario y embriagador. Los individuos astutos, dominantes, crueles, persuasivos, falsos, manipuladores, y audaces son óptimos candidatos para situarse en posiciones de ventaja en la lucha por el poder”,
Y continua en otro párrafo:
“entre los políticos de relumbrón, y también entre los de segunda y tercera fila, hay una desmesurada proporción de delincuentes y paradelincuentes estupendamente disfrazados de servidores de la comunidad”. “El juego del poder selecciona a sujetos que ya llevan de por sí unos rasgos que les predisponen a servirse del esfuerzo y entusiasmo ajenos en provecho propio…Por eso es tan importante ir creando mecanismos, en democracia, que atenúen la tendencia natural a la fagocitación del gobierno por parte de diversos tahúres de distinto pelaje y sus compinches”.
Por el contrario, habrá un grupo de visionarios que se preocupará de seguir siendo solidarios, cultivar las relaciones humanas, la espiritualidad, organizar una sociedad justa, potenciar una educación en valores. Son el grupo que se adapta lo suficiente para vivir, sin ceder, con sentido crítico, librepensamiento, rigor y honradez intelectual, ejerciendo la consecuencia, con la vista puesta en cambiar la sociedad; que lucha sin quemarse porque sabe que la eficacia y el grano de arena que se puede aportar está en extenderse y unirlo a otros similares para cambiar el mundo. En definitiva, a puro de conseguir muchas personas honradas y con contenido. Como dice F. Savater “Sin contemplaciones” Eds. Libertarias,”la tarea de quienes desean transformar positivamente nuestra condición o la sociedad, no consiste en reinventar a los hombres, sino en colaborar con los mejores de ellos y respetar la dignidad de todos”. Es una utopía, pero es el camino al que hay que aproximarse. Tanto los explotadores, los revanchistas, como los salvadores, solo han causado ineficacia, dolor, y a veces sangre; la historia lo ha demostrado sobrada y repetidamente. Son más de lo mismo.

Ángel Cornago Sánchez.
Algunos de estos párrafos y citas, forman parte de mi próximo libro “Salud y Felicidad” que se editará en los próximos meses.



domingo, 18 de septiembre de 2016

LA CORRUPCIÓN NO SÓLO ES ECONÓMICA

LA CORRUPCIÓN NO SÓLO ES ECONÓMICA

La corrupción económica entre los políticos lleva ocupando las portadas de los periódicos desde hace años; probablemente pocos, ya que el problema es muy anterior, casi desde la transición, y se va haciendo público a pesar de los esfuerzos por taparlos.

Bienvenida sea la denuncia. Era un tema que la democracia tenía pendiente y que había que atajar en una lucha sin cuartel para moralizar la vida pública. Debe ser una actitud de “no retorno” y de continua vigilancia, porque es fácil volver a las andadas.

Hay otras corrupciones, tan graves como las económicas y que se dan a diario sin que tengan eco en la opinión pública, adormecida por tanto dislate que con ella se utiliza. Comento algunas.

Los políticos con frecuencia utilizan medias verdades, y a veces incluso mentiras, para denostar al adversario, o para sacar rédito electoral. El “todo vale” para manejar a la opinión y, sobre todo, el voto del ciudadano, es grave, y es algo habitual en el discurso de muchos políticos y, también, de algunos periodistas.
A veces, los argumentos son tan simples y groseros que no se mantienen, y se vislumbra claramente que son sesgados. En realidad, no nos tienen respeto; nos tratan como a ciudadanos de ínfimo nivel intelectual.

También algunos jueces, dependiendo de qué partido les ha votado para formar parte del Consejo del Poder Judicial, dictan sus sentencias. Los jueces deben ser independientes, lo contrario sigue siendo la perversión de la democracia y de su sagrada función.

Algunos medios de comunicación, algunos periodistas, hacen lo mismo. Pervirtiendo su deber de informar con veracidad, sesgan las noticias, cuando no, ponderan con entrevistas preparadas a determinados políticos, intentando ridiculizar, y a veces hasta envilecer, al adversario; hacen lo contrario con los que intentan ensalzar. En vez de hacer información, reflexión, para que el ciudadano sea el que decida con datos lo más objetivos posibles, utilizan informaciones sesgadas, incluso manipuladas, junto a frases o axiomas que todos suscribiríamos, e incluso, unidas a una carga emocional para que sean más eficaces los mensajes y los asumamos con más facilidad.

Los ciudadanos lo tenemos difícil. No debemos dejar que nos manipulen; debemos tener criterios propios informándonos en diversos medios de comunicación, hoy relativamente fácil con internet.

También es corrupción no obrar conforme a la verdad; no cumplir con el deber, con ética profesional. No todo vale.


Ángel Cornago Sánchez

jueves, 15 de septiembre de 2016

LEALTAD. SE PUEDE APLICAR A ALGUNOS POLITICOS


LEALTAD

No se sabe si estás o se te espera.
Eres tan indolente e indeciso,
tan fugaz de opinión y compromiso
que no se puede fiar en tu palabra.

Con asertos vacíos te pronuncias,
sin saber cada cual tus opiniones,
pues te guardas de hacer tus intenciones
barajas descubiertas, compartidas.

Eres oscuro, simple, traicionero.
No eres amigo fiel ni de proyectos,
pues la moneda de cambio que utilizas
es la mentira y el falso lisonjeo.

No hay odio ni desengaño en mi discurso,
sé que es así la vida, solo indiferencia,
y la certeza de saber con quién me cruzo.

Ángel Cornago Sánchez.
De mi poemario, "El mundo en el que habito". Eds. Trabe.
Imagen tomada de Google.: significado.net


miércoles, 7 de septiembre de 2016

RIGOR INTELECTUAL, SIEMPRE NECESARIO, ESPECIALMENTE EN EL MOMENTO ACTUAL.

RIGOR INTELECTUAL


En el momento histórico que estamos viviendo, tal vez más que nunca, en un ejercicio de responsabilidad, es preciso que influyamos en el entorno social que nos toca vivir, cada uno en su ámbito, pero desde una actitud de honradez y rigor intelectual a la hora de enjuiciar las situaciones y expresar las opiniones. No podemos ser esclavos de ideas preconcebidas ni de consignas emanadas por asociaciones, religiones, o partidos políticos, aunque a la postre podamos coincidir con ellas después de reflexionar y valorar sus posturas.
Hoy, los ciudadanos, hastiados ya, contemplamos el espectáculo bochornoso de la lucha irracional, y, a veces, barriobajera entre partidos, utilizando como armas arrojadizas las propuestas del contrario, aunque puedan ser razonables, incluso adecuadas para la mayoría. Han pervertido sus fines. No es el bien de los ciudadanos origen de sus cargos lo que persiguen, sino, unos conservar el poder, y los otros arrebatárselo. En definitiva, el poder por el poder. En esta lucha vale todo. Ni se sonrojan con sus zafios razonamientos. No valoran nuestra capacidad intelectual; piensan que nos engañan con sus actitudes y burdos argumentos. Están jugando con fuego. Algunos, no cumplen los requisitos mínimos deseables para ostentar el cargo de responsabilidad y de decisión que ostentan.
 Mientras, los ciudadanos asistimos decepcionados a ese perverso olvido por parte de las clases políticas que nos dominan. Pienso que el sistema está gastado. La “derecha”, “la izquierda”, tal como las utilizan los protagonistas, no sirven, aunque, probablemente los que no sirven son dichos protagonistas. Sería preciso que la mayoría de esos dirigentes desaparecieran de la escena y fueran sustituidos por otros nuevos, honrados, y con la idea clara de que su objetivo somos los ciudadanos, no conservar o llegar al poder.
Nosotros, también somos responsables. Los dogmatismos del signo que sea nos esclavizan. De hecho, un tanto por ciento nada despreciable de los votos emitidos en las elecciones, son de personas que siempre votan al mismo partido, por ideas preconcebidas. Gracias a que hay otro tanto por ciento que es capaz de otorgar su voto dependiendo del juicio sobre sus actuaciones, los países progresan, por que, la alternancia, el pluripartidismo, el consenso entre los diferentes partidos, es progreso.
El librepensamiento es la base de la vida intelectual. Es preciso no estar sujetos a  dogmatismos en ningún ámbito. El discurso de los partidos huele a naftalina, por caduco, por sesgado, por poco riguroso, por poco respetuoso con la inteligencia de los ciudadanos. Debemos ser capaces del análisis despojado de ideas preconcebidas, lo contrario es una rémora para el progreso y para llegar a posiciones más avanzadas.
El juicio es un ejercicio intelectual que debe ser libre de dogmas políticos y religiosos. La religión es respetable; incluso, si se quiere, adecuada en el ámbito privado, pero no como doctrina en el análisis del quehacer político y social. La militancia política, la simpatía por un partido, también lo es, pero sin sometimiento a sus consignas y a sus líderes si no lo hacen bien y no permiten el debate; antes al contrario, los simpatizantes y militantes, tienen más responsabilidad que los demás para intentar reconducir su deriva y mantenerlos siempre vivos. Esta actitud, los dirigentes respectivos no lo van a consentir; no les interesa militantes con criterio propio, sino personas que acaten las consignas que emergen de la cúpula sin discutirlas: son los militantes que medran, los que van en las listas, pero el suicidio de los partidos, situación a la que ya hemos llegado.
El momento actual en España, es especialmente grave. Nuestros políticos nos están enseñando sus lados más oscuros. Unos más que otros.

            Ángel Cornago Sánchez